Monday 2 October 2017

EL PRÍNCIPE DE DINAMARCA

Ya lo sabes
Nuestro día es largo; más que para el resto
Descansa a la luz del atardecer; arriba en el nuevo crepúsculo
Respira
Salta
Placer
Éxtasis
Encuentro.
Tu día esta comenzando.

¿Ves ya algo?
Busca a Jimmy
Búscale en el baño del Karaoke
¡Búscalos!
Busca a los reyes de la playa,
o al príncipe danés que ávidamente
gatea
No hay excusa para no olvidar...
tampoco para recordar.

Así que pisa fuerte, deja que otros se descuiden.
¡Más fuerte! deja allí tus penas
Mira fijamente a las luces amarillas
Aparca junto al cedro, debemos estar cerca
¡Cuidado!
Las prisas no son buenas. Debemos estar cerca
la gente es naranja
Cruza la plaza
no malogres tu espalda, deja tus cosas
a donde vamos no las necesitas...

¿Ves algo?
Busca a Jimmy
Busca a Jimmy dentro del bar
¡Búscale!
Busca a los reyes de la playa o
al príncipe de danés que ávidamente
gatea sobre la blanca nieve
No hay excusa para olvidar
ni tampoco para recordar

Tu excusa será el trance.
No tengas miedo. Alza la barbilla. Los edificios nos protegen
Alza el codo
¿Miedo? Mira sus ojos marrones...
No cojas provisiones. No tendrás hambre ni sed
No seas tímido. Los animales
de esta jungla
son milenarios
No tengas frío. Estás en Carcosa.
No dudes. No hay pasado ni presente aquí.

Pero dime...
¿Ves algo?
Busca a Jimmy
Busca el baño del Karaoke
¡Búscalos!
Busca a los reyes de la playa o
al príncipe danés que ávidamente
gatea
No hay excusa para no olvidar...
ni tampoco para recordar

Estalactitas bajo el bíceps
¿Quedamos en casa del lagarto?
Ya sabes... estará jugando
El sudor se acumula en mi puerta
pero no te acomodes
en su infame madriguera
su lengua es larga y porta húmedos virus
y lo más importante:
no te pierdas, pues
hay muchos caminos.
Muchos ojos.
Olvida a los rezagados con
los que te cruces
recuerda que ya se les ve la calavera
y tú tan joven...

Ahora pregunto por inercia, una última vez:
¿todavía no ves nada?
Has encontrado a Jimmy
No has cantado en el Karaoke
Odias a los reyes de la playa y
el príncipe ya volvió a Dinamarca
Tu excusa desaparecerá

cuando de verdad conozcas la ciudad.

Monday 15 February 2016

POESIA: UNA DÉCIMA ATRÁS

Las décimas son un tipo de estrofa formada por diez versos que el poeta usa principalmente para emitir quejas o protestas. La estructura es "abbaa ccddc".

Anteriormente dirigidas a gobiernos o gremios, hoy la uso para algo más mundano y simple:


Un beso de sirena, en la ciudad roja, a mí te trajo.
Ninguna otra sirena será mía ahora
¡Tú, debilitadora! ¡Tú, traicionera! ¡Tú, duradera!
Libera mi apatía, libérame de nuevo;
libérame de tu remedio, dime tú qué fue peor.

Voy a olvidar mi plano vientre; 
Oh! Créeme voy a olvidar mis altas fiebres
pero, por favor, déjame ir
y que tu corazón, se apiade de mí.
De todas formas volveré a ti. Cuando la orca cace la liebre.

Friday 5 February 2016

LA ANÉMONA Y LA MOLA

Siento una incómoda sensación de rechazo. Las miradas se desvían al conectar con la mía; incluso en el espejo la vista se pierde en una singular lejanía. Con esperanza espero, pero no a la compasión; espero a la gentil alma transparente; alguien que sepa ver mi corazón incluso a través de la carne.
Desde el silencio juzgo y soy juzgado, y altivamente impongo mi autoridad moral (con una voz profunda, proverbial) ante el resto de los mortales, como si yo mismo no lo fuera. Con arrodillada paciencia espero a los momentos de calma y bohemia que recientemente he hallado a la segura luz de las velas, en la inesperada soledad.
La pluma me otorga futuro; me juzga y me refuerza en esa seguridad mentirosa, frágil como una nube. Siento la sincera belleza de la soledad entre dudas de madurez y clarividencia.

(...)

Durante todo el día, había estado padeciendo, pendiendo de un hilo y buscando más allá de su mirada un atisbo de ella, aquélla que le turbaba de tal manera, tan profundamente, que hacía a su mirada volver, una y otra vez, hacia el vacío de la esperanza. Cada rostro similar cubría su piel de frescura y alivio, y permanecía así aunque ella no fuera ella finalmente, pues hasta en lo más insondable él anhelaba a ella, hasta lo más insondable de su hueso más impenetrable la deseaba, y el simple hecho de creer por un simple segundo que ella aparecería, le localizaría en la distancia, le sonreiría entre todos aquellos jóvenes, solamente a él... le hacía sentirse fuera de sí, pese al tremendo golpe que vendría después, al comprobar que ella podría estar en cualquier lado.     

Sunday 6 December 2015

los blogs APESTAN

Hace poco leí y supe del francés André Breton, algo así como el Andy Warhol del subsuelo de principios del siglo pasado: unos años absolutamente penosos pero ricos en algo de lo que hoy carecemos: pasión. El hoy: todo está inventado. Todo está cerrado. Todo tiene un precio.

Estas líneas están escritas en medio de un fuego cruzado de distracciones: estas distracciones son los elementos del llamado “progreso”, son los elementos que hoy dan sentido a las vidas humanas. No necesitas ser consciente de ellas, pues ellas te alcanzan sin permiso. Las distracciones han matado la creatividad, el desarrollo emocional, la racionalidad, el avance cerebral, lo puro y lo impuro. Este blog (pese a ser mostrado a través de un elemento de las distracciones) promete luchar por recuperar terreno para nuestras mentes. No será revolucionario, ni siquiera demasiado ofensivo. Tratará de crear sinergias psíquicas, si os atrevéis.

La mezcla de temas tendrá el propósito de seguir una línea recta de caos; temas heterogéneos de cultura y espíritu homogéneo. El caos del que hablo está literalmente tatuado en mi piel. Es para mí una evolución lógica al control y el dominio de uno mismo. Como diría el simpático nihilista Rust Cohle, «El tiempo es un circulo plano. Todo lo que hayamos hecho o vayamos a hacer, se repetirá una y otra vez».

Quiero mirar más hacia atrás que hacia adelante. Abrir este blog es contradictorio; es mirar para allí, para adelante, pero lo que no puede hacer uno nunca es estancarse. Quiero hacer reír y llorar; escandalizar, confundir, motivar. Hablaré en presente, pasado, futuro, en primera y tercera persona, con comas y sin comas, con puntos y sin puntos. Os hablaré a vosotros o a otros, o a mí o a nadie. Podré empezar por el principio o por el final o por el medio, y lo mismo con el final.

Soy joven y veterano en esta guerra contra uno mismo que es escribir. A mis espaldas se confunden las batallas que en mi mente se libraron. Soy polifacético porque soy afortunado; porque nací afortunado: literatura, cine, viajes, animales, energía, psicología, filosofía... No hay ni una que por sí sola me calme por dentro. Todas son estrellas en un firmamento de posibilidades cósmicas.

No mentiré: no me influencio ni inspiro a mí mismo. No me veo a mí mismo como “yo, ese”. Me veo viviendo como Hemingway, escribiendo como Delibes y queriendo como Van Gogh. Es una delicada situación la de ponerse a uno mismo un nombre. Charles Bukowski escribió un descorazonador poema, “so you want to be a writer?”, acerca de los miedos al papel en blanco, lo que es el catálogo de mis pensamientos.

Las cosas ya no pueden ser descritas desde un ángulo cómodo: la obtusidad es un don que se nos ha concedido. Las metáforas, tropos clave en la construcción de la verdad, forman parte irrepetible en mi vida, y así expreso las cosas que veo y siento. La literatura plana, la que está aplastada, está sin vida y carece de moral y capacidad para impartirla. Ésta será una de las pocas críticas que haga contra un artista, pero es que es un delito y un atentado contra los trabajadores de las artes ver textos en las librerías como los de Gabriela Cañas entre otros, cuyo sopor e irrelevancia son un veneno para las nuevas generaciones de lectores; veneno esparcido por ciertas editoriales, cerca ya de la banalidad de las productoras de Hollywood. Al escribir, mi intención es usar las palabras para el bien, mi versión del bien. Hay quien dice que la palabra escrita puede ser un arma... para mí no debe ser más que un cuchillo para untar, a lo sumo. Hay quien se escuda en sus propios textos... para mí la escritura es la manera de mostrarme a mí mismo. Escribir no podría ser nunca para mí una profesión, y quien lo hace, es un mercenario.